Background Image

Soy kievita. Estoy defendiendo a Donbass

23.05.17 02:35

Mi nombre es Alexey Selivanov. Soy kievita. Hoy estoy defendiendo a Donbass. Antes del golpe de 2014, serví al Estado de Ucrania, y siempre defendí la hermandad y la unidad de Ucrania y Rusia. El Maidán pasó delante de mis ojos. Vi que la «infantería» del Maidán eran adolescentes nazis y personas sin hogar traídas a Kiev. Vi puñados de ellos caminando a través de los bloques del gobierno y gritando, "¡Kiev, levántate!". Había muy pocos en aquel momento, desde unas docenas hasta doscientos. Vi a los periodistas ucranianos abanicando el odio y la enemistad de manera organizada, atrayendo a los ciudadanos al lado del Maidán. Vi a los actuales «diputados» y a los «miembros del gobierno» de Ucrania que, entonces, salían de los seminarios organizados por las embajadas de los Estados Unidos y de otros países. Vi a deshonestos, degenerados y pervertidos sexuales, marcados por todas partes, penetrando en el poder, detrás de los «activistas» y los radicales. Los vi disparando a los «Cien en el Cielo» y cortando los árboles para que fuera imposible ver, a través de los agujeros de bala, que la gente del Maidán había sido disparada desde su propio lado.

¡Mira quién gobierna Ucrania hoy!. Parubiy, el "presidente del Parlamento", es un idiota certificado y un abierto nazi, el fundador del Partido Socialnacionalista, de donde salieron todos los «Azov». El pederasta Avakov, «ministro del Interior», es un convicto y está buscado internacionalmente. El pedófilo Ukolov, consejero y director de relaciones públicas del "presidente" Poroshenko. El criminal y narcotraficante Kiva es ¡«consejero del ministro» y «oficial del Ministerio del Interior»!. ¡Y estas son sólo algunas de estas «autoridades»!. Narcotraficantes, pederastas, degenerados y gente absolutamente corrupta están humillando al pueblo. Cada uno de ellos es conocido por una gran cantidad de basura, certificados de locura y artículos criminales; basta con mirar en google sus nombres para encontrar las pruebas. ¿Puede ser la razón por la que Poroshenko prohíbe las redes sociales hoy en día?. Quiere decidir por ti qué debes leer y dónde debes comunicarte. ¿Prohibirá, en un futuro, completamente que la gente acceda a Internet?.

Algunos dicen que en Ucrania usted puede criticar libremente a las autoridades, que en Ucrania hay libertad de expresión. Escupe en la cara de estos mentirosos. El escritor Buzina fue asesinado, y los perpetradores no han sido castigados todavía. Los periodistas mueren y nadie se preocupa. Ahora han encarcelado a Eduard Kovalenko, una figura pública de Genichesk, un hombre corriente que nunca se ha apoderado ni bloqueado nada, ¡que simplemente dijo en la plaza que estaba en contra de la guerra!. Hoy en día, para ser interrogado o encarcelado, no hace falta siquiera expresar, sino sólo tener su propia opinión, o ser amigo de aquellos que tienen su propia opinión. ¡La gente ordinaria perece en las prisiones de Ucrania, y nadie levanta la voz en su defensa!.

Hoy, ¡las «autoridades ucranianas» quieren prohibir la Iglesia Ortodoxa, convertirla en una herramienta obediente y quitar sus templos!. El Estado ucraniano se ha situado más allá de la moralidad, más allá de la historia y más allá de la fe.

¡Oficiales y soldados del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), del Ministerio del Interior, de las Fuerzas Armadas de Ucrania!. No os escudéis en el Juramento. Se lo distéis a la gente de Ucrania no a los ladrones, a los sobornadores y a los criminales. No al nazi idiota Parubiy que, en el momento de Maidán, hizo un llamamiento para matarte. Hoy, las «autoridades» os hacen rehenes de sus crímenes, os atan con sangre y os obligan a perseguir, encerrar en las cárceles y matar a la gente común que no está de acuerdo con estas «autoridades».

¿Crees que los parubiys son eternos?. ¿Que todo continuará igual en Ucrania cuando mueran?.

No. Las personas normales regresarán. Incluso si ahogáis Ucrania en sangre. Yo también hice el juramento de lealtad al pueblo de Ucrania, y volveré con seguridad. Y muchas personas como yo.

Entonces, ustedes tendrán una única oportunidad de justificarse. Guarden su lugar de trabajo y su pensión. Probad con documentos, pruebas y evidencias que defendisteis a la gente. Que ayudasteis a la gente a alejarse de la persecución del régimen. Que advertisteis a la gente sobre casos criminales. Que cubristeis a todos aquellos que están en contra de la guerra y en contra de las autoridades ucranianas criminales. Que ustedes sirvieron al pueblo y lucharon contra el régimen.

Después de la guerra, los judíos llamaron a los que los salvaron de la represión nazi los "Justos entre las Naciones". ¡Permanezcan en la memoria del pueblo como los justos, y no los criminales!.

Alexey Selivanov