En las negociaciones de Minsk, que tuvieron lugar en septiembre de 2016, se firmó un acuerdo sobre la separación de fuerzas y medios de las partes en conflicto, en tres segmentos piloto del frente, el 1 de octubre. La condición para continuar las negociaciones sobre el arreglo pacífico del conflicto era el cumplimiento del régimen de «completo silencio» en estos segmentos durante 7 días.
Tras la firma del acuerdo, el representante de la República Popular de Lugansk (RPL) en el grupo de contacto de las negociaciones de Minsk dijo que el intento, por parte de cualquiera de los lados, de aprovechar la zona completamente desmilitarizada sería considerado como una clara violación de los Acuerdos de Minsk y daría lugar a una respuesta contundente.
Habiendo violado todos los acuerdos de Minsk anteriores, esta vez Ucrania decidió que ni siquiera daría la impresión de respetarle. El 1 de octubre, la retirada mutua de las tropas de la primera línea se llevó a cabo sólo en una de las tres zonas, en la RPL. En las otras dos - una en la República Popular de Donetsk (RPD) y la otra también en la RPL - la parte ucraniana se negó a retirar sus tropas, diciendo que no habían recibido la orden correspondiente.
Las autoridades de las Repúblicas se han visto obligadas a que sus tropas también permanezcan en sus posiciones originales, a pesar del hecho de que los puestos de control se habían desmontado rápidamente antes del 1 de octubre.
Al mismo tiempo, el día anterior, la inteligencia de la RPD descubrió, en el mismo segmento del frente de Donetsk donde se había planeado retirar las fuerzas y los medios de los contendientes, la llegada a las posiciones ucranianas de dos tanques, dos vehículos de combate de infantería y siete camiones cargados con munición.
El mismo día, en el segmento del frente de Lugansk, donde la retirada de las tropas se llevó a cabo posteriormente, después de todo, los francotiradores de Ucrania atacaron a los zapadores de la RPL que trataban de desminar un camino con el fin de garantizar la seguridad de los observadores de la OSCE que estaban vigilando la proceso de retirada. La Misión de la OSCE ha anunciado oficialmente que la parte ucraniana obstaculiza su labor.
Además, en el segmento del frente de Lugansk, los soldados que están en las posiciones del ejército de la RPL informaron que dos días antes de la retirada prevista de las tropas, los militares ucranianos equiparon un nuevo búnker en la zona «gris», a 50 m de distancia de la posición del ejército de la República.
Por lo tanto, no es difícil adivinar que Kiev ni siquiera tiene intención de cumplir con el nuevo acuerdo, al igual que no tenía, ni un solo día, la intención de respetar el régimen de «silencio completo», anunciado por las Repúblicas de manera unilateral el 15 de septiembre y respaldado por Ucrania ante la insistencia de los diplomáticos europeos.
En la noche del 1 de octubre, en la víspera de la retirada prevista de las tropas, los militares de ucranianos bombardearon el territorio de la República Popular de Donetsk alrededor de 200 veces, y aproximadamente la mitad de las rondas se realizaron con artillería pesada.
A la noche siguiente, después del fracaso de la separación de los lados, el número de ataques ucranianos aumentó a casi 300, y Kiev no sólo utilizó en el bombardeo morteros y artillería pesada, sino también tanques. Como resultado de los bombardeos, dos soldados del ejército de la RPD murieron y otro resultó herido.
La destrucción de viviendas e infraestructuras civiles, con el próximo invierno frío que se avecina, pone a los civiles de Donbass en el borde de la supervivencia. En la mayoría de las zonas bombardeadas de Donetsk y Gorlovka, las autoridades de la RPD han instalado cocinas de campaña para proporcionar a los residentes de estas localidades, al menos, comida caliente.
En total, durante la semana pasada, que se supone fue la segunda semana de «silencio completo» en el Donbass, Kiev abrió fuego en el territorio de la República 863 veces, con la mitad de las rondas hechas con armas pesadas prohibidas por los Acuerdos de Minsk .
Por otra parte, habiendo declarado otro alto el fuego el 1 de septiembre de 2016, apoyado la iniciativa de las Repúblicas del régimen de «silencio completo» el 15 de septiembre, y firmado el acuerdo sobre la retirada de las tropas de la primera línea el 1 de octubre, Kiev ha continuado proporcionando armas y equipo a la línea de contacto en el Donbass.
De acuerdo con la inteligencia de la RPD, durante la semana pasada, han llegado a las posiciones ucranianas seis baterías artillería de 122 y 152 mm, dos compañías de tanques, dos baterías de morteros de 120 mm y unos 100 mercenarios polacos a Mariupol, la ciudad más grande en el sur de Donbass.
La misión de la OSCE señaló en su informe semanal la retirada, de los sitios de almacenamiento de equipos ucranianos, de 29 sistemas motorizados de artillería de 122mm, 92 obuses de 122 y 152 mm, 57 cañones antitanque de 100 mm, 78 tanques, 4 sistemas de misiles antiaéreos y 1 sistema de misiles antitanque guiado.
Ayer, el día después de que la parte ucraniana hubo interrumpido la retirada de las tropas, llegaron a la posición ucraniana en el segmento del frente de Donetsk otros 10 tanques, 23 vehículos de combate de infantería y 70 mercenarios extranjeros.
En el segmento del frente de Lugansk, Kiev suministra armas aún más letales. De acuerdo con la inteligencia de la RPL, durante la semana pasada, llegaron a la posición ucraniana una batería de MLRS "Smerch” de 300 mm y 14 MLRS «Grad", además de tanques, cañones antitanque, vehículos de combate de infantería y vehículos blindados. Por otra parte, la inteligencia de la RPL descubrió una estación de inteligencia electrónica ucraniana directamente en la línea de contacto.
Los soldados del ejército de la RPL también han notado un gran número de mercenarios en la parte ucraniana del segmento del frente de Lugansk. Se han encontrado banderas de Turquía, de Georgia, de los radicales Tártaros de Crimea, y en algunos lugares, en los que las posiciones de las partes están separadas por unos pocos cientos de metros, los soldados de la República oyen, desde el lado ucraniano, que sólo se habla en idioma extranjero. Ni ruso ni ucraniano.
Por otra parte, de acuerdo con la inteligencia de la RPL, la semana pasada, al oeste de Lugansk ha llegado la unidad ucraniana «Crimea», que consta principalmente de mujeres.
Sin embargo, en general, la situación en la RPL es aún más tranquila que en la RPD, aunque también tiende a agravarse. Durante la semana pasada, Kiev hizo 17 ataques contra el territorio de la República, no sólo con morteros, también con vehículos de combate de infantería, lanzagranadas antitanque y sistemas de misiles antitanque guiados.
Kiev también continúa la entrega masiva de municiones a la zona de la ATO. De acuerdo con la inteligencia de la RPD la semana pasada fueron entregadas, en el territorio controlado por Ucrania en el segmento del frente de Donetsk, 300 toneladas de explosivos, al parecer, proyectiles de fósforo.
La munición se almacena en almacenes situados, en su mayoría, dentro de localidades civiles. En dos de ellas, los vecinos salieron a protestar, exigiendo la retirada de los depósitos militares, que amenazan su vida, fuera de sus localidades. En respuesta, Kiev envió a los empleados de servicio de seguridad (SBU) a estas localidades para reprimir las protestas.
Además, de acuerdo con los residentes locales, los servicios especiales de Ucrania obligaron a las empresas locales en el territorio controlado por Kiev a que les proporcionaran una lista de los empleados para una movilización posterior para integrar los llamados grupos de autodefensa. Parece que Kiev no se atreve a anunciar la próxima séptima ola de movilización, tras el fracaso de las dos anteriores, y está tratando de aumentar el tamaño de su ejército de esta manera.
Por otra parte, el presidente Poroshenko vetó la ley sobre el procedimiento para la resolución del contrato con el ejército de Ucrania en la zona ATO 'hasta el final del período especial'.
Por lo tanto, Kiev no tiene intención de detener las hostilidades en el Donbass. Tampoco tiene la intención de cumplir con las condiciones políticas establecidas por los Acuerdos de Minsk. Según la encuesta social de la última semana, realizada a los diputados de la Rada Suprema, sólo el 15,6% de los encuestados votaría por dar un estatuto especial al Donbass, mientras que el 63,6% votaría en contra.
El presidente de la RPD, Alexander Zajárchenko comentó los resultados de esta encuesta, diciendo que habían demostrado que Kiev no estaba dispuesto a una solución política del conflicto en el Donbass. Por lo tanto, en el marco de la preparación para las elecciones al autogobierno local, que el líder de la República retrasó tres veces con la esperanza de encontrar un compromiso con Kiev, el 2 de octubre la RPD y la RPL llevaron a cabo las primarias.
En dos barrios de las afueras de Donetsk, las autoridades locales tuvieron que dotar a los centros de votación con refugios antiaéreos, en previsión de bombardeos, altamente probables, por la parte ucraniana.
23 medios de comunicación y 147 periodistas solicitaron la acreditación a la Comisión Electoral Provisional de la RPD para cubrir las primarias. La Comisión también ha registrado 1.065 observadores para las elecciones primarias, incluyendo los 22 internacionales de Finlandia, Grecia, Alemania, Italia, Osetia del Sur, Francia, República Checa, Serbia y Abjasia.
Una vez que la votación preliminar terminó, la Comisión Electoral Provisional de la RPD informó que 370.000 ciudadanos de la República habían tomado parte. Los observadores extranjeros señalaron la plena conformidad de las primarias en las Repúblicas con los estándares democráticos internacionales.
Los medios de comunicación ucranianos anunciaron las primarias en Donbass como un "juego de la democracia”.
Actualización:
Tras el fracaso del proceso de separación del 1 de octubre de 2016, en Minsk se acordó una nueva fecha para la retirada de las tropas, el 3 de octubre. Kiev, una vez más, se negó a retirar sus tropas.
Por otra parte, cuando las unidades del ejército de la RPD se habían retirado a las posiciones preparadas en la retaguardia, la parte ucraniana abrió fuego en el territorio de la República desde las posiciones que sus tropas deberían ya haber abandonado en ese momento.
Al mismo tiempo, los medios de comunicación ucranianos informaron que el ejército de la RPD había abierto fuego contra los observadores internacionales. La OSCE y el Centro Conjunto para el Control y la Coordinación del cese del fuego no confirmaron esta información.
Kiev se apresuró a aclarar que el fuego había sido abierto hacia el territorio controlado por Ucrania desde la posición de la RPD supuestamente abandonada. Los observadores de la OSCE y el Centro Conjunto para el Control y la Coordinación, que vigilan el proceso de separación en esas posiciones, no confirmaron esta información tampoco.
Por orden de las autoridades militares de la República, las unidades del ejército de la RPD han vuelto a las posiciones previamente abandonadas.
- Kiev bombardea localidades controladas por Ucrania - Los nacionalistas se apoderan de los Consejos Locales ucranianos - Los militares ucranianos disparan a la Memoria de los niños asesinados de Donbass
- Creación de un fondo de rescate para Mariupol en la RPD - Llamamiento a los ucranianos para que rompan los vínculos con Rusia - Amenaza nazi de una "Noche de Cuchillos Largos" para la oposición
- Provocación de los nazis en Avdeevka - Prohibición de las redes sociales rusas en Ucrania - Leyes ucranianas para la eliminación de la Iglesia del Patriarcado de Moscú