La primera manifestación multitudinaria de 2014 tuvo lugar en la plaza Maidán de Kiev. Cerca de 50.000 personas participaron en ella. La plaza Maidán estaba abiertamente custodiada por radicales armados con palos. Son las autodefensas del Maidán, que fueron oficialmente acusados de custodiar el campamento. El Sector Derecho, que unía las principales organizaciones ultra-radicales y ha sido la más importante fuerza de choque del Maidán todavía prefería quedarse en la sombra en ese momento. El quinto piso de la Casa Sindical que ellos ocuparon era absolutamente inaccesible para los extranjeros, incluidos periodistas, y fuera de ella los miembros del Sector Derecho escondían sus caras con pasamontañas, en todo momento. El Automaidán organiza una concentración en Mezhyhirya, la residencia privada del presidente Yanukovich, para entregarle una citación a un "tribunal popular" de Maidán pero fueron detenidos por el cordón policial. Los miembros del Automaidán elaboraron un "protocolo" sobre la negativa del Presidente a aceptar esta citación.

La Rada Suprema aprobó el presupuesto del Estado para 2014 y aprobó también otras leyes sobre la posibilidad de bloquear páginas web contando con la decisión de los expertos, sobre la responsabilidad administrativa por la colocación de carpas, escenarios y sistemas de sonido para la celebración de reuniones no autorizadas, sobre la prohibición del uso de máscaras y portar armas en las manifestaciones, sobre el registro obligatorio de las organizaciones políticas financiadas desde el extranjero. Esas leyes eran necesarias para armonizar la legislación ucraniana con las normas europeas y la Comisión de Venecia (NDT: órgano consultivo del Consejo de Europa) había aprobado estas leyes como perfectamente correspondientes a la práctica europea. Sin embargo, los líderes de la oposición y los medios de comunicación ucranianos, al instante, las nombraron como "dictatoriales" y las presentaron como un ataque a la participación en las acciones de protesta. Los partidarios del Maidán se pusieron más furiosos por el voto de esas leyes a través de votación a mano alzada a pesar de que el reglamento de la Rada Suprema aceptó esta manera de votación por la ausencia de posibilidad de votar mediante tarjetas. Ese día la oposición bloqueó tanto la tribuna como el sistema de votación de la Rada.

La fiesta ortodoxa de la Epifanía fue anunciada como "sangrienta" por los radicales el día anterior. En la manifestación se reunieron en Kiev unos 100.000 manifestantes enfurecidos por las leyes aprobadas por 'la mayoría pro-Presidente en violación de las normas del Reglamento y sin una discusión en las comisiones pertinentes'. Los manifestantes fueron convocados desde el escenario para ir al edificio de la Rada Suprema, es decir, al distrito gubernamental que ya estaba bajo una fuerte custodia. Los primeros en atacar el cordón de guardias en el distrito gubernamental de la calle Grushevsky eran radicales bien preparados del Sector de Derecho que iban equipados con palos, adoquines, petardos y cócteles molotov, tan sólo tres horas después del inicio de la manifestación popular. Prendieron fuego a varios autobuses de los Berkut, camiones, cajeros automáticos del estadio Dinamo y comenzaron a atacar a los antidisturbios Berkut con piedras y palos afilados con puntas de metal. Más tarde, por la noche, incendiarion cientos de neumáticos apilados frente al cordón policial y añadieron a su arsenal de petardos y cócteles molotov algunos fuegos artificiales que dispararon directamente a las filas de las fuerzas especiales de la policía. La policía utilizó armas no letales, como granadas de aturdimiento y gases lacrimógenos. También pusieron en funcionamiento cañones de agua con los que trataron de extinguir las llamas de los vehículos. Aparecieron las primeras víctimas. Uno de los manifestantes perdió su mano izquierda al resultar arrancada, otros tenían laceraciones e intoxicación por gas. Consiguieron romper el cordón policial y los berkut fueron brutalmente golpeados; algunos de ellos fueron capturados y llevados a la Casa de los Sindicatos y al sótano del Ayuntamiento, donde, como se vio más tarde, había una sala de tortura. Hubo 103 manifestantes y unos 100 policías que solicitaron ayuda médica, 42 y 61 de ellos respectivamente fueron trasladados a hospitales. A eso de las 20:00h Vitali Klitschko y un grupo de diputados fueron a la residencia del Presidente de Ucrania en Mezhigorie. V. Klitschko pidió a Yanukovich retirar a la policía, a los Berkut y a los "titushki" de las calles. Yanukovich llama Arseni Yatseniuk y le propone negociar.

El violento enfrentamiento en la calle Grushevsky continuó. Sin embargo, a pesar de todos los esfuerzos de los radicales del Sector Derecho éstos no lograron provocar al Berkut a otra "dispersión sangrienta de los manifestantes pacíficos". El número de observadores simpatizantes en la calle Grushevsky disminuyó significativamente : de la misma manera como ocurrió en Maidán en diciembre. El 21 de enero el Berkut pasó a la ofensiva. Tardaron 20 minutos en desalojar a la multitud del Maidán, donde las Autodefensas sólo permitían entrar a sus habitantes, así como de la Casa de los Sindicatos, dejando a los manifestantes ordinarios cara a cara con el Berkut, el cual había recibido la estricta orden de volver a sus posiciones en ese momento.

La presión de los radicales del Sector Derecho en el cordón de guardias en la calle Grushevsky hizo más fuerte. El Berkut consiguió un permiso para usar, junto con granadas aturdidoras, balas de goma, pero el fin sigue siendo el mismo: repeler a los atacantes sin moverse de su sitio. Ese día el enfrentamiento llegó a un nivel de violencia completamente nuevo cuando dos manifestantes murieron. Fueron asesinados en la calle Grushevsky, por arma de fuego, el armenio Sergei Nigoyan, y el bielorruso Mikhail Zhiznevsky, además, Yuri Verbitski fue encontrado muerto en un área de bosque donde había sido llevado por unos desconocidos. Los soldados Berkut, antes del inicio de la investigación oficial que duró un año, fueron culpados de estas muertes: Posteriormente se descubrió que Nigoyan y Zhiznevsky habían sido disparados por escopetas que nunca habían formado parte del armamento de las unidades policiales. Y, sin embargo, la denuncia de los líderes de la oposición fue suficiente para elevar el grado de las protestas hasta el siguiente punto de ebullición. En la reunión de fundación, los representantes de la oposición confirman la Declaración de la proclamación de una "Rada Popular de Ucrania". Los miembros de la organización pro-gubernamental Oplot (Bastión) llegaron a Kiev para contrarrestar el Automaidán.

Las negociaciones entre el presidente Yanukovich y los líderes de la oposición duraron cinco horas. Según sus conclusiones, la oposición declaró que se había llegado a un acuerdo con el gobierno sobre la liberación de las personas detenidas por las protestas con la condición de liberar el recinto presidencial y desbloquear la calle Grushevsky. La siguiente Asamblea Popular, que reunió a cerca de 50.000 personas en el Maidán, rechazó esta propuesta, después de lo cual Arseni Yatseniuk anunció que el Maidán se extendería hacia la calle Grushevsky. En las regiones, los manifestantes comenzaron a apoderarse de las administraciones del estado. Al día siguiente habían sido tomadas ocho administraciones: en Kiev, Lviv, Ternopil, Jmelnitsky, Rivne, Chernivtsi, Zhitomir y Ivano-Frankivsk. Las administraciones del estado en Volyn (Lutsk) y en Transcarpacia (Uzhgorod) fueron bloqueadas. En Cherkasy, a pesar del asalto, fue liberada por la policía. También hubo reuniones en las administraciones del Estado de Zaporizhia, Odesa y Dnipropetrovsk.

En Kiev los manifestantes construyeron nuevas barricadas en la calle Institutskaya y se apoderaron del edificio del Ministerio de Política Agraria y Alimentación, situado en Kreschatik. La confrontación en la calle Grushevsky se reanudó, con el uso de armas traumáticas. La autodefensa de Maidán capturó a tres policías. Uno de ellos fue herido con arma blanca tras lo cual fue puesto en libertad y trasladado a un hospital; los otros dos policías estuvieron secuestrados en el edificio del Ayuntamiento, donde, como se supo después de su liberación al día siguiente, fueron torturados.

Se llevó a cabo una nueva ronda de negociaciones entre los líderes de la oposición y el presidente. Durante ellas, Víctor Yanukovich propuso al líder de la fracción Batkivschina (Patria) Arseni Yatseniuk el puesto de primer ministro y al líder del partido UDAR, Vitali Klitschko, el puesto de viceprimer ministro de asuntos humanitarios. La oposición rechazó estas propuestas considerándolas insuficientes. Un grupo de 300 radicales intentó, fallidamente, apoderarse del Ministerio de Energía de Ucrania, un objetivo estratégico en esta serie de secuestros de edificios administrativos. La Casa de Ucrania (el antiguo museo de Lenin), sin embargo, fue asaltado y tomado por los manifestantes después de que habían descubierto allí a policías guardándolo. Los manifestantes rompieron el vidrio blindado de la fachada del edificio y comenzaron a arrojar cócteles molotov a los policías cuando éstos salieron del inmueble a través de una puerta lateral. Fue la primera vez que los manifestantes usaron una granada RGD-5, sin embargo, no retiraron el pasador.

Después de la siguiente ronda de negociaciones entre los representantes de las autoridades y la oposición Yatseniuk se negó a encabezar el gobierno. El Presidente y la oposición tomaron la decisión de derogar las leyes del '16 enero' y trabajar juntos en la reforma constitucional. En Kiev, el movimiento civil Spilna Sprava (Causa Común) se apoderó de uno de los edificios del Ministerio de Justicia de Ucrania en la calle Gorodetsky 'para entrar en calor y dormir'. La ministra de justicia, Elena Lukash, hizo una declaración que, en caso de que el edificio no fuera desalojado, el gobierno declararía la ley marcial en el país. Los activistas del Spilna Sprava fueron echados del edificio por miembros del partido Svoboda. El edificio del Ministerio de Energía también fue desalojado.

En Donetsk, las organizaciones sociales locales de los cosacos y de los veteranos de guerra de Afganistán, comenzaron a organizar la milicia voluntaria para ayudar a los defensores de los órganos de la ley con el fin de mantener el orden en la ciudad. En Járkov se lanzaron dos artefactos explosivos en una reunión de partidarios del Maidán. En Odesa el líder de la organización "Moledintsvo" (Juventud Unida), Anton Davidchenko, anunció la formación de escuadrones de la milicia popular para defender la ciudad de las “organizaciones nacionalistas de radicales”. En Sebastopol 12 organizaciones prorrusas anunciaron la posible “salida fuera del ámbito administrativo de Ucrania” con el propósito de crear el 'Estado Federal de la Pequeña Rusia' orientado hacia Rusia, en caso de que la oposición llegara al poder en Ucrania.

El primer ministro de Ucrania, Mikola Azárov, dimitió; su renuncia fue aceptada por el presidente Víctor Yanukovich. A pesar de que, según la Constitución de Ucrania, la dimisión del primer ministro debe ser seguida por la dimisión de todo el Gabinete del Ministro, se asignaron responsabilidades de Jefe de Gobierno de Ucrania al primer viceprimer ministro ucraniano Serhiy Arbuzov. En la sesión de la Rada Suprema se derogaron 9 de cada 11 leyes del “16 enero”.

La Rada Suprema de Ucrania aprobó una ley de amnistía para todos los participantes en las protestas, excepto aquellos que hubieran cometido delitos especialmente graves. Hubo un punto en el proyecto de ley, sin embargo, que estipulaba que la amnistía sólo entraría en vigor después de que los manifestantes liberaran todos los edificios administrativos secuestrados.

Los líderes de la oposición afirmaron que la ley de amnistía había sido adoptada en violación de las normas constitucionales. Uno de los líderes de Automaidán, Dmytro Bulatov, que ha sido considerado secuestrado durante 8 días, apareció cerca de Kiev y dio una entrevista en la que declaró que había sido golpeado y torturado por unos desconocidos. Le habían cortado una oreja e incluso le crucificaron. Después fue conducido a un suburbio de Kiev, le arrojaron desde un coche y fue abandonado allí débil e indefenso.

El Ministerio de Asuntos Internos registró la oficina del partido Batkivschina y, según los materiales que extrajo de los servidores, hizo una declaración fundamentada: la protesta, a partir de noviembre de 2013, no había sido espontánea sino que había estado bien organizada incluyendo el desarrollo violento de las manifestaciones. El Servicio de Seguridad de Ucrania abrió un proceso penal por la tentativa de golpe de Estado.