Dicen que no serán los primeros en disparar, pero no van a dejar sus armas en casa.

Numerosos grupos de milicias patriotas (la llamada policía civil) se están preparando para el malestar post-electoral.

Jackson, Georgia. Bajando una carretera rural hay un campamento oculto donde se están reuniendo miembros de las milicias para entrenar con armas, practicar tiro, el cuerpo a cuerpo, y para una manifestación improvisada por el candidato presidencial Donald Trump.

"Para las personas que van a votar por Trump. ¡Hurra! ", grita Chris Hill, abogado, que es conocido como «Bloodagent».

«¡Hurra!», gritan decenas de milicianos en respuesta.

Hill admira a Trump.

Él dice: "Esta es la última oportunidad para salvar a América de la ruina".

Hill opina de los posibles desórdenes y disturbios post-electorales: "Estaré allí para ayudar a mis compatriotas, y para prevenir su desarme, y voy a luchar, y voy a matar, y yo mismo podría morir".

Se aproxima el resultado final de las más controvertidas elecciones presidenciales, y los grupos de milicias armadas se están preparando para la posibilidad de que el 8 de noviembre les roben las elecciones y, en los días siguientes de la victoria de Hillary Clinton, comenzar a protestar.

Dicen que no serán los primeros en disparar, pero no van a dejar sus armas en casa.

De acuerdo a: Политика "На ваш взгляд"