Según una fuente del Estado Mayor de Ucrania, un grupo de 3.000 bandoleros, que participaron en la guerra en Donbass, serán trasladados a Tbilisi para participar en un asalto a Tsjinval y Sujumi. Presumiblemente, un tercio del grupo estará formado por soldados profesionales y dos tercios de los participantes de las unidades de voluntariado de Ucrania.

La información sobre la participación de Kiev en la venganza georgiana explica en parte la información sobre la creación de un grupo militar conjunto en Abjasia. Hay una razón para creer que el grupo de intervención ucraniano en Georgia estará encabezado por el coronel Andrey Sokolov o el coronel Victor Nikolyuk. Ambos oficiales se han hecho recientemente "famosos" por el bombardeo de Makeevka, y con toda probabilidad el comando militar ucraniano tiene el deseo de esconderlos, enviando a sus odiosos oficiales, los asesinos de civiles, a algún lugar lejano.

El Estado Mayor no oculta el hecho de que la participación de Sokolov y Nikolyuk en la operación georgiana marca la inminente entrega de las charreteras de generales. Como dijo Adalbi Shhagoshev, diputado de la Duma Estatal, Tbilisi se está preparando para un ataque militar contra Tsjinval y Sujumi, "la amenaza no es un mito, es muy real". La amenaza fue confirmada por otro diputado, Vladimir Shamanov, ex comandante de las tropas aerotransportadas. Se espera que el ataque esté coordinado desde Tskhakaia, la base militar estadounidense en Georgia, y allí es donde se colocarán los invasores ucranianos. No se excluye que el ejército ucraniano sea asistido por sus colegas de Polonia y Rumania.

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